Eventos virtuales

Eventos virtuales, eventos híbridos, conferencias online, webinars… Te suena todo esto, ¿verdad? ¿Has incluso desarrollado ya tu propio fondo para tus conexiones a través de Zoom? Los últimos meses han producido una fuerte aceleración en la implementación de las nuevas tecnologías para la celebración de eventos. Al fin y al cabo, el evento virtual ha sido la única opción en determinados periodos de este año.

Aunque hay una parte de nuestra alma de productores de eventos que echa mucho de menos los eventos presenciales, la realidad es que el evento virtual o, al menos, el híbrido van a acompañarnos durante bastante tiempo. Esto no quiere decir que vayan a ser las únicas modalidades que puedan darse a partir de ahora, pero en el transcurso de los próximos meses tendremos que mantener estas opciones en la lista e incluso veremos cómo conviven con la vuelta progresiva a lo eventos presenciales, pues así lo requiere la emergencia sanitaria y así está ya ocurriendo.

Más allá de vaticinar el futuro, lo que queremos es darte la información que necesitas para estar al día de todo lo que puedes conseguir a través de los eventos virtuales o híbridos. ¿Empezamos?

Hace poco que el MCI Spain Event Services expuso los datos concluidos tras uno de sus últimos estudios relativos a la aceptación de los eventos virtuales actualmente y, por si tenías dudas, los números decían lo siguiente:

• ¿Puede un evento virtual reducir los costes? El 83% de las compañías afirmaron que sí.
• ¿Y resulta fácil acceder y puede ser un ventaja para la audiencia potencial? Efectivamente.
• ¿Y entonces facilita el alcance de una mayor audiencia? Exacto.

La situación provocada por la COVID-19 ha impedido la celebración de muchos eventos que venían planificándose desde el año anterior. Pero que no hayamos podido celebrar esos eventos no implica que hayamos dejado de necesitar reunirnos con compañeros, colegas o posibles clientes. Es por esto que el los eventos virtuales se han posicionado como un elemento clave a la hora de seguir comunicándonos y “reuniéndonos”.

Los eventos virtuales han sido el salvavidas para muchas fechas clave. Han permitido seguir celebrando conferencias, reuniones e, incluso, festivales mientras se mantenían todas las medidas de seguridad y no hacía falta desplazarse a una localización en la que poder exponerte a contagios.

De todas formas, si no has tenido oportunidad de asistir a alguno, pregunta a la gente de tu alrededor y comprobarás que al menos el 70% de los participantes de los eventos salen siempre con sensaciones positivas.

Es posible que te suene raro, pero ¿cómo pensabas denominarlos si no? Los eventos híbridos deben producirse y el término que los identifica es una definición perfecta a fin de cuentas: reúne parte de los eventos presenciales y parte de los eventos virtuales; son un símbolo positivo para la recuperación de los eventos presenciales al 100%, una transición que, quizá, se mantenga durante mucho tiempo.

A la hora de elegir qué tipo de evento celebrar, siempre te diríamos que apostaras por el híbrido si la localización y el presupuesto te lo permiten. Con el evento híbrido conseguimos que se celebre parte del evento de manera presencial con aforo reducido a la vez que alcanzamos una audiencia mucho mayor al retransmitirlo y añadir opciones online. Las posibilidades ocupan una lista larguísima: diseño de escenarios virtuales con 3D, avatares, recreación de videojuegos y dinamizaciones, interacción en el momento con asistentes físicos y virtuales, conferencias en tiempo real en streaming, accesos posteriores para quien se lo perdió durante el live… Uno de los ejemplos más recientes que tenemos al alcance es la celebración del c de c 2020, el festival de la creatividad que tuvo lugar en San Sebastián para su realización mientras se lanzaba virtualmente para una mayor audiencia que la que pudo asistir en persona.

¡El streaming, señores, que es una maravilla! Retransmitir un evento de manera dinámica y a través de buenas plataformas que generen engagement suficiente en conjunto con la escaleta del evento solo hace que sumar y sumar. La accesibilidad que se ha abierto gracias a ello es perfecta para casos de aquellos a los que les hubiera gustado ser asistentes físicos pero pueden conformarse con serlo virtuales. Y decimos conformarse no porque vayan a pasarlo peor, sino porque quizá tenían ganas de plantarse allí pero hubo algo que se lo impidió: la distancia, la responsabilidad familiar, las fechas por trabajo, y esto solo cogiendo los primeros ejemplos de un largo etcétera.  

En definitiva, ya te comentábamos que sí, echamos de menos los eventos de antes, pero también estamos entusiasmados con las posibilidades desatadas en los últimos meses y queremos exprimirlas todo lo que podamos. Desde dar rienda suelta a la creatividad con diseños 3D hasta experimentar con hologramas. ¡Aprovecha el momento y disfruta de los eventos virtuales, que nos lo enseñaron en Star Wars y ya lo tenemos aquí!